MADERA DE ARTISTAS

“La Escuela de Artistas trabaja en la formación y promoción del talento andaluz y las promesas artísticas”“Habrá quien lo desconozca pero la canción más radiada a nivel mundial, el Esclavo de sus besos de Bisbal, nació en Sevilla de la mano de José Abraham y Juanma Leal, los impulsores de una importante cantera de talentos en la capital: la Escuela de Artistas…”“Y es que, para que el público pueda disfrutar del espectáculo hay que cuidar también la otra cara de la moneda…la de los que ponen todo su empeño en adquirir la formación necesaria para estar a la altura. Esta otra faceta del arte se vive entre bambalinas en un día de función pero también en las largas horas que muchos pasan entre las paredes de un aula de música o en un estudio de grabación.”“Así, para vertebrar el aprendizaje artístico, existen en Sevilla academias para profesionales de distintas ramas y una de ellas es esta cuna de artistas ubicada en la calle Pavía, número 4. Se trata de un Centro de Alto Rendimiento…liderado por profesionales de extenso curriculum, nace como observatorio de las promesas de esta industria, siendo una escuela única y pionera en el sur de España para dar salida al talento andaluz.”“Además de una formación integral, la academia cuenta con servicios de producción, edición musical y estudio de grabación, donde se fabricó el exitoso Cobarde de David Bustamante y otras producciones de Tamara, Pastora Soler, o Christian Castro.”“El proyecto permite a los alumnos vivir su experiencia musical de la mano de profesionales que les sirven de orientación a la hora de canalizar sus inquietudes artísticas. Para ello, se imparten cursos de iniciación en formación vocal y expresión corporal, cursos integrales para cantantes orientados a la carrera musical y clases individuales de potenciación respiratoria, control del cuerpo y tesitura vocal. También se ofrecen audiciones en vivo y Master Classes con artistas conocidos, así como talleres complementarios de fotografía, peluquería, maquillaje, estilismo y psicología.”

Correo de Andalucia - 10 de Noviembre de 2009